24 mayo 2014

Se decidió una nueva ubicación para la zona roja

   El jueves a la tarde en la parroquia Nuestra Señora del Valle se realizó una nueva reunión convocada por el secretario de Control Urbano, Gustavo Luzardo, en la que se acordó que la zona roja funcione en las calles 52 e/ 115 y 121. Como estaba previsto, del encuentro participaron padres y alumnos de los colegios Albert Thomas y Nuestra Señora del Valle, además de vecinos de la zona del Bosque y de la histórica zona roja. Luego de pedir que se las incluya en esa instancia de diálogo, finalmente también formaron parte del debate integrantes de la asociación OTRANS.
   Además de decidirse en forma consensuada la nueva ubicación, se pautó una tercera reunión para el lunes a las 16 hs en la que se incluirían al debate las formas de abordar la seguridad de la nueva zona. Según manifestó la presidenta de OTRANS Claudia Vásquez Haro en diálogo con Comunidad al Palo!, dicho encuentro sería “junto con la Secretaría de Seguridad, pensando también en cómo se llevará adelante la seguridad del espacio”.
   “La idea no era confrontar entre los vecinos de la zona del Bosque y los que habían hecho un acuerdo con nosotras, ni tampoco confrontar a la comunidad educativa con las personas trans”, manifestó Vásquez, y agregó que “la idea era llevar un trabajo conjunto, superador, donde nos involucremos todos y todas”.
   La reubicación a 115 e/ 54 y 60 –tal lo acordado entre OTRANS y la Municipalidad– había sido suspendida el jueves de la semana pasada, luego de una reunión entre Luzardo e integrantes de las escuelas mencionadas. Días antes de aquel encuentro, padres y alumnos del Albert Thomas hicieron un abrazo simbólico al colegio y firmaron un petitorio en rechazo de la reubicación que enviaron a la Municipalidad y al Concejo Deliberante.
Expresiones contra el traslado al Bosque
   Al conocerse el acuerdo de traslado de la actividad sexual callejera al Bosque hubo diversas manifestaciones públicas en rechazo de tal decisión. Una de las primeras en conocerse fue la posición Diana Sacayán, referente del Movimiento Antidiscriminatorio de Liberación (MAL), quien había expresado que “con una nueva zona roja no se van a solucionar los problemas de fondo”. También opinó que “no pretendemos que se nos confine a la zona más oscura del Bosque para ser prostitutas hasta la eternidad”, refiriéndose a la necesidad de establecer nuevas formas de inclusión laboral y social para el colectivo trans.
   Por otra parte, y en el marco de la convocatoria por el Día Internacional contra la Homofobia, la Lesbofobia y la Transfobia, distintas organizaciones pro diversidad sexual también se habían manifestado contra el intento de relocalización. En esa oportunidad definieron al Bosque como “una de las zonas más aisladas y liberadas de la ciudad” y afirmaron que con la decisión del traslado se “profundiza el aislamiento e invisibilización de identidades, problemáticas y cuerpos disidentes”.
   Consultada sobre estas expresiones, la presidenta de OTRANS declaró que la organización que representa no está discutiendo si la prostitución tiene que ser un trabajo o no, sino que están destrabando “un conflicto de violencia entre vecinos, la policía y las compañeras trans”. En ese sentido, afirmó que “cuando hay una problemática concreta en la que se necesita una solución urgente, me parece que hay prioridades” y que desde OTRANS están pensando “en que no se violenten los derechos humanos de las compañeras”.



Escuchar la entrevista a Claudia Vásquez Haro, presidenta de OTRANS.